Anne Stephan-Chlustin
Wiesbadener Kurier - Motivos inclinados por el viento (2001)

Exposición Waltraud Maczassek

La artista crea una desbordante riqueza de color, como ocre, amarillo, naranja o rojizo de terracota. Sus obras recuerdan el colorido de paisajes de España, la tierra que la pintora escogió como segunda patria.

Los lienzos muestran cálidos matices de terracota, propio del espacio mediterráneo, pigmentos naturales como suavizados por el sol. Si en sus lienzos no hubiera solamente esta belleza de color podría ser banal, pero en esta pintura hay intensidad así como la voluntad de experimentación con diferentes materiales y técnicas. Sus pinturas se muestran actualmente en la galería Winter.

Son cuadros con relieves matéricos que muestran abstracciones, pero al mismo tiempo sugieren determinadas figuraciones. En el cuadro matérico “Trazados” se vislumbran gestos enérgicos, rasgados en la materia, abriéndose profundos surcos en el espacio horizontal. Inciertas formas figurativas surgen de los espacios saturados de color y ponen acentos, como las formas naturales de vegetación, en un paisaje yermo.

Un Díptico que está dentro de la misma línea que se titula “territorios del Silencio” nos cuenta algo más sobre estas formas que integrados en un paisaje aparecen torcidos por el viento. Hay formas que emergen mediante trazados efímeros de Grafito de las articuladas superficies del paisaje, cuyas tonalidades tienen una gama que va del ocre, al terracota hasta el óxido, suavizados mediante una delicada veladura blanca. Solamente hay un paso de estas pinturas al collage que parece una continuación lógica. En ellos aparecen elementos implantados en sus espacios pictóricos como, granos, arena, tejidos naturales, restos de madera o bien cortezas o otras formas de vegetación de sus paisajes elegidos. En otros lienzos se integran formas geométricas en el espacio pictórico, en una tectónica que recuerda a lo arcaico. En “Espacio Azul” un azul mediterráneo en forma de ángulo y en un lugar inesperado marca la composición de un misterioso paisaje urbano, mientras que en el cuadro “Camino de una vida” la composición queda marcada por una ancha franja en forma de zócalo. El lienzo “Superposiciones con espacio abierto” tiene una sorprendente profundidad, como si se tratara de una ventana abierta. Elementos narrativos como mapas de ciudades y paisajes quedan solapados por fenómenos de la naturaleza y del paisaje. De manera que se constituye un diálogo lleno de tensión que opone la realidad clara y concisa con la naturaleza y el paisaje.