Vinyet Panyella
L’eco de Sitges (2000)

La pintura de Waltraud Maczassek, una trayectoria en curso, con anotaciones sobre la suite cartográfica

A lo largo de los últimos años, al contemplar la evolución de la pintura de Waltraud Maczassek, me venía a la memoria un texto poético de R. M. Rilke titulado Ein frauen schicksal, es decir, Un destino de mujer. No por el sentido global del poema, porque en todo caso la trayectoria de Waltraud es el caso justamente opuesto, ni por uno de los versos más sobrecogedores, que hace Da stand sie fremd... (...Y allí quedó, extranjera...), sino por la idea propiamente del destino que configura, al fin y al cabo, la vida del artista.

Todo el camino recorrido hasta hoy mismo por esta pintora ha sido una constate afirmación de la voluntad creativa a partir de dos premisas: la una, la tradición del pensamiento artístico, que tanto bien conoce; la otra, la del esfuerzo y del trabajo para continuar avanzando y afianzando la propia personalidad. El que vemos en esta exposición que ahora se inaugura es la consecuencia y el estadio natural del proceso creativo.

Se trata de una exposición que muestra el estado actual del proceso evolutivo de la pintura de Waltraud Maczassek. Su pintura se mueve en la dualidad de un lenguaje fragmentado por el uso múltiple y plural de las diversas técnicas descriptivas, como una metáfora de la fragmentación del mundo contemporáneo, y en el trasfondo conceptual que todas sus obras contienen y transmiten. La pluralidad de lenguajes y la armonía cromática subrayan y potencian al máximo la carga conceptual de la obra. La investigación y el esfuerzo se encuentran, también, en todos y cada uno de los cuadros expuestos. Otra de las capacidades de la pintura de Maczassek es de la comunicación, rehuyendo el hermetismo y otorgando las claves de la contemplación de la obra a partir de una serie de títulos que tienen mucha concreción lírica. La suya es una manera de pintar que se muestra en tres características: la simplicidad, el control y la gran contención que la obra realizada manifiesta. En el texto que he escrito para el catálogo de la exposición he querido subrayar un determinado carácter literario de la pintura de Maczassek, puesto que la utilización simultánea de toda una serie de elementos incorporados junto con los que son creados de nuevo configuran una particular manera de hacer; si me refiriera a un texto literario lo haría invocando la intertextualidad.

El título con que he intentado definir el momento presente de su pintura no es equívoco: La lírica conceptual de Waltraud Maczassek. Un ejercicio crítico. La pluralidad de técnicas y lenguajes y la armonía conceptual y formal se acontecen a partir de la tensión, equilibrada de toda una serie de dualidades que forman parte de las ideas de las que el artista parte: nacimiento/muerto, razón/impulso, investigación terrenal/reflexión sobre el universo, crecimiento libre de la naturaleza/acción del tiempo, impacto del mundo exterior/introspección reflexiva del acto creativo. Todas estas dualidades, se abocan a la vez en el último tramo de la obra de Maczassek casi concentrado en un solo arquetipo creativo: el del universo de las cartografías. Este es el momento actual de la obra de la artista, momento abierto, del cual creo que hay que esperar sucesiones diversas. Es un espacio que con ha hecho suyo en el contexto de la pintura contemporánea actual. Desde que el mundo es mundo, todas las civilizaciones han dejado su huella en la cartografía.

Es decir, en la voluntad de interpretación del universo conocido a partir de las dimensiones perceptibles del espacio, Waltraud Maczassek lo hace desde la reinterpretación de espacios conocidos devolviendo verso la esencia interpretativa, reinventando los caminos y los paisajes, y dejando la huella de su percepción e investigación conceptual. Es por eso que, finalmente, devolvemos al poema de Rilke, para contradecirlo, porque Waltraud Maczassek ha encontrado de hace mucho tiempo su destino de artista, y lo sigue con la tenacidad, la fidelidad y la creatividad que le otorgan un nombre propio en el complejo panorama artístico de nuestros días.

* Texto correspondiente a la presentación de la exposición de pintura de Waltraud Maczassek.
Galería Ágora. 22 de julio de 2000